El ejercicio que se realiza se lleva a cabo a través de la realización de una serie de posturas de estiramiento globales que se efectúan de forma adaptada y personalizada según la posibilidad de la persona que las prácticas.
En el K-Stretch® conseguimos trabajar los músculos en su conjunto a través de posturas que nos permiten estirar el cuerpo de forma acompañada con nuestra respiración, tratando de raíz las posibles descompensaciones existentes en nuestro cuerpo y aportándonos una base de apoyo que mejore nuestro equilibrio. Además, ejerce una labor preventiva en nuestro día a día combatiendo las tensiones musculares relacionadas con el estrés, las malas posturas e incluso la etapa de crecimiento.
La corrección postural con K-Stretch® está recomendada para los niños y adolescentes que se encuentran en etapa de crecimiento y ya comienzan a acusar problemas posturales, para personas en edad avanzada que de igual modo sufren patologías relacionadas con la salud muscular y de colocación del cuerpo, así como para personas con enfermedades concretas donde esta técnica ha demostrado ser muy beneficiosa como el caso Parkinson.